Seguidores

sábado, 27 de noviembre de 2010

POR FIN SILENCIO Y PAZ...

Un golpe seco de puerta anunciaba la tenebrosa visita.Los niños ya dormían o al menos permanecían silenciosos en su cuarto.Una bocanada de aire frío y cortante presagiaba lo peor.La mesa estaba puesta con la comida ya fría por la inútil espera.En el silencio de la casa resonó su nombre con un grito desgarrador .Un escalofrío recorrió su cuerpo de pies a cabeza y como una autómata o una victima hacia su verdugo fue a su encuentro.
Su aspecto era lamentable ,su ropa entresacada y borracho como una cuba ,como siempre .Volvió a gritar su nombre diciéndole .- que mierda me tienes preparada,que asco….Ella sabia que no traía ganas de comer ,como siempre cuando bebía, pero resultaba una buena excusa para comenzar una de las interminables broncas de cada dia.Levanto el plato de la tortilla helada y lo estampo contra el suelo, el vaso siguió el mismo camino y antes de que pudiera esquivarlo ,el primer bofetón sonó cobarde en la sencilla salita.Ella no gritó, nadie la oía y si así fuera de nada servia.Ya lo había podido comprobar.Todavia no había acabado de tocarse la cara entumecida por el dolor cuando una terrible patada le partió el alma. Se hizo un silencioso silencio y solo se escucho el gemido del llanto de alguno de sus niños que temeroso sufría en la intimidad de la habitación.El, del impulso de la terrible patada y su mal estado ,se había caído sobre la mesita de centro haciéndose daño en la pierna.Vovieron a temblarle las piernas por como podía terminar aquello pero el ,en vez de seguir agrediéndole, se levanto ,se recompuso con cara de fiera y otro golpe seco de puerta indico que se había vuelto a marchar.Ella tras un suspiro de conformidad comenzó a sollozar de sus dolores del alma .Todavía no habían asomado las cabezas los niños que acudían a consolar a su madre cuando en el silencio de la noche se escucho un frenazo al que sucedió un golpe generoso y mortal.Ella se asomo tras las cortinas y después de tanto tiempo una leve sonrisa se esbozo en su cara .Todo había terminado por fin.Por fin silencio y paz, mucha paz…
( Se lo dedico a todas las mujeres ,especialmente las que han sufrido en su cuerpo el maltrato ,y a sus hijos ,esas victimas silenciosas...)

8 comentarios:

  1. Muy hermoso relato, pero desgraciadamente no suelen tener tanta "suerte".

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Tristeza infinita por ellas que no supieron salir de su agujero nif, nif.
    Besos

    ResponderEliminar
  3. La justicia estuve en la calle. Al fin liberada.
    Un saludo

    ResponderEliminar
  4. Mira, ella por lo menos se quedó ya tranquila para siempre.

    Un beso!!!

    ResponderEliminar
  5. Muy oportuna esta entrada, una historia que hace reflexionar desde el lado de la víctima y del agresor.
    Un abrazo y feliz semana.

    ResponderEliminar
  6. Cuando he leido esto, (si es tuyo, felicidades), sinceramente me ha conmovido. Me lanzo de continuo a hacerte un comentario, el que me ha sugerido, y veo que ya alguien ha pensado lo que tantos desearíamos, que sucediera el final que relatas, pero..., desgraciadamente como dice Dama no suele ser así, las maltratadas lo sufren casi toda su vida.

    ResponderEliminar
  7. El salir de una situación así es complejo, pero se puede. No obstante, aparte del apoyo de amigos y familiares, se requiere la ayuda de un buen terapeuta.

    ResponderEliminar
  8. Es estremecedor pensar que es la historia real para muchas mujeres y que necesitan ser muy valientes porque no tienen este desenlace feliz que querríamos.

    ResponderEliminar